Para las pruebas cortas es necesaria una velocidad que no tengo. Para el maratón, una resistencia neuro-muscular que tampoco. Las mejores carreras, pues, me salen entre los 10 km y el medio maratón.
Del año saliente me quedo con la mini-temporada primaveral de media montaña. Tras una semana santa idílica correteando por los montes de Oñati (Aloña, Urbia, Degurixa...), invitado por mi amiga Jaione, encadené varios triunfos por categoría, el sub-campeonato provincial y un buen costalazo bajando el puerto de Navacerrada.
Y tras un fantástico verano de entrenamientos entre Amsterdam, Torremolinos y la costa aquitana, una gran carrera: el medio maratón de Talavera de la Reina (5 de octubre). Gané mi categoría, hice marca personal (1h22m01s) y fue mi segunda carrera más valiosa, junto a los 10 km de Pinto del año anterior (83,79% de valoración).
El último maratón me dejó un poso amargo, pues pensaba que lo había preparado bastante bien. Pero un clavito saca otro clavito, así que me tomé 3 semanas de descanso (viaje a Rabat - Casablanca incluido) y volví a la carga con el ya tradicional cto. provincial de clubes de campo a través en Parla.
Una mañana magnífica y un recorrido de tierra - hierba con pequeños repechos, lo típico del cross. Tres vueltas a un recorrido que no llegaba a los 2 km. Me lo tomé como todos los años tras el descanso del maratón, empecé prudente y me fui animando sobre la marcha. Me encontré bastante bien, y sirvió de empujón para comenzar una nueva temporada.
Lo mejor, la estupenda jornada atlética en compañía de mis compañeros de club y otros colegas.
1 comentario:
Nahi duzunerarte,
Ondo segi eta muxu bat,
Jaione
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