5.6.11

Midnight in Paris (Woody Allen, 2011)


Un escritor norteamericano algo bohemio llega con su prometida Inez y los padres de ésta a París. Mientras vaga por las calles soñando con los felices años 20, cae bajo una especie de hechizo que hace que, a medianoche, en algún lugar del barrio Latino, se vea transportado a otro universo donde va a conocer a personajes que jamás imaginaría iba a conocer...

Midnight in Paris es una película paradójica: por un lado, celebra los clichés de una ciudad que Allen adora tanto como Nueva York, y, por otro, siente la necesidad de desmontar la dimensión simbólica de esos clichés, materializada en un dream team de la vida bohemia del París de los años 20 que parece un parque temático para intelectuales de pacotilla, y que Allen recrea sin miedo a hacer el ridículo.

Es en los requiebros de esa fantasía imposible donde Allen logra que Midnight in Paris se convierta en una película original. El viaje en el tiempo que emprende su alter ego en la pantalla le permite reivindicar el presente como tabla de salvación. El hombre siempre quiere lo que no tiene, y ese deseo no es otro que el de escapar de la muerte, el de dejar su huella para la posteridad. Y por muy ligera y cálida y deliciosa que sea esta comedia, el poso que deja es pura melancolía.

1 comentario:

Guillermo dijo...

Para mi de lo mejorcito de este año en cine.
Y al menos Allen sube con creces el patético nivel al que nos tenía acostumbrado ultimamente.

Salu2-G