Al principio la novela me desconcertó un poco por el argumento, simplemente no me lo esperaba. Una vez entré en él, me fue cautivando. Luego, a dejarse llevar. La capacidad de Bernardo para fabular historias es impresionante, y si a veces le pillo el truco literario es siempre motivo de asombro y admiración. La literatura vasca es pequeña, pero ha aprendido rápido. Poco tiene que envidiar a lo que se escribe actualmente en otras lenguas y culturas.
1 comentario:
Me lo apunto.
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