La Pedriza 02/09/07

Gracias al empeño de Miguel Ángel asistimos hoy a la cabalgada de los 4 fantásticos por La Pedriza. Meeting point Canto Cochino 8:30h. Día precioso. Aquí tenemos a Miguel Ángel posando mientras Nacho enfrenta su hierro a la superbike de Mario.

Adelantar que a Mario, que viene de Béjar, no le conocíamos. Y hay que reconocer que a pesar de ser primo de Miguel Ángel es majísimo, amén de todo 1 ciclista con piernas de acero.

Mario, Iñaki y Nacho, confiados a la suerte ("¿por dónde nos va a meter este tío?").

Con la responsabilidad del mando, Miguel Ángel da toda clase de explicaciones, que si por aquí, que si por allá...

... pero como buenos alumnos no le hacemos ni caso ("¡venga, vamos ya!").

Salimos de Canto Cochino (9:45h. / 1.020m) por la carretera que remonta el río Manzanares. Enseguida la carretera se bifurca y, atravesando la barrera, cogemos la de la izquierda que sube, en sombra por el bosque, con asfalto irregular, bastante recto.

Mario y yo vamos delante y 1 poco detrás Nacho con Miguel Ángel; ritmo medio, regular, y en menos de 4km. llegamos a la Fuente del Retén (10:05h. / 1.267m); aquí llegan los retrasados, está claro que así nos van a tomar por domingueros:

La carretera gira a la izquierda pero nosotros cogemos la pista de tierra que sigue hacia delante; las mismas 2 parejas; subida constante pero no pronunciada; el camino va describiendo 1 larga curva a la derecha hasta que se nos presenta abajo la 1ª y preciosa vista del valle (10:20h.), con el Embalse de Santillana al fondo:


Aquí tenemos de nuevo a Nacho y Miguel Ángel, encantados de conocerse:

Guapos no, pero todavía estamos en el tipo:

Nos adelanta 1 pareja que habíamos pasado por el camino y seguimos. Aprox. Km 5, Fuente del Pistón (1.418m). El camino sigue girando a la izquierda y remontando + arriba la misma ladera anterior.

Al pillar a la pareja Mario se va con el chaval y deja a la chica sola; yo me quedo en terreno de nadie; eso es al doblar la curva a la derecha en la Umbría de la Garganta (1.468m), justo encima de la Fuente del Retén; previamente había habido 1 tramo en ligera bajada (km 7-8).

Para el km.9 el chaval se queda a esperar a su chica y yo me voy otra vez con Mario. Ya todo seguido y 1 poco rapidito hacia el Collado de los Pastores (11:05h.) (km 11-12), máxima altura de la jornada (1.748m).

Hay varios ciclistas descansando. Le pedimos a 1 que nos haga fotito a Mario y a mí con La Maliciosa de fondo:

Van llegando otros que hemos adelantado. También Miguel A. y Nacho al poquito(11:10h.):

Y conseguimos la única y auténtica foto oficial de los 4 fantásticos, casi tapando la Bola del Mundo:

Aquí sí que la vista es ya impresionante. Madrid al fondo. Por 1 lado, cerca, La Maliciosa, La Bola del Mundo y Cabezas de Hierro:

Por el otro todo el cresterío pedregoso del Yelmo; el Embalse de Santillana... aquí descansamos + e hicimos fotos.

4 paneles nos informan al detalle de lo que abarca nuestra vista (aquí Cabezas de Hierro):

De charla con la pareja con La Maliciosa presidiendo:

Luego (11:20h.) bajamos al Puente de los Manchegos (1.710m) y ya ladeando la Sierra del Francés, en suave bajada (a veces repuntando de nuevo), llegamos a otro lugar típico de parada, el Collado de La Nava (km 19 / 11:45h.) (1.600m), con buenas vistas y cruce con desviación a la izquierda para subir hacia la Pradera de La Nava; aquí estoy yo, estropeando el paisaje:

Al fondo la Sierra de los Porrones, por donde habíamos hecho la subida ladeando:

Por ahí se sube a la Pradera de La Nava, a ver si nos aventuramos otro día. 1º habrá que hacer algo con este turista:

La Maliciosa va quedando atrás:

Seguimos (11:50h.) 1 poco +, y de repente llegan las zetas bruscas de bajada. En poco tiempo se baja hasta el Puente de los Franceses (1.207m) que cruza el Manzanares. Se sigue bajando por la margen derecha y a la altura del Puente del Vivero enganchamos asfalto, ya hasta la barrera y enseguida de nuevo Canto Cochino. Tensa y bonita bajada. Aquí tenemos el perfil:

Recuperamos en el bar tomando unos refrescos (12:40h.):

Hoy ha sido sólo para ver el percal, otro día volvemos y le zurramos como se merece.