Una carrera bastante corta, 12 km, por unos caminos que ya conozco de entrenar por allí de vez en cuando. El perfil es bastante benevolente, apenas hay que subir andando ningún tramo, así que la participación fue espectacular a nivel popular. Y para rematar, un día soleado de primavera. Todo perfecto para disfrutar.
El primer km cruza el pueblo y sube hacia el camino que lleva a la zona de La Berzosa. Ese primer tramo sirve para que cada uno vaya cogiendo su ritmo y el pelotón se vaya estirando un poco. Giro a la izquierda y bajada rápida hacia el barrio, donde ya nos ponemos en fila de a uno:
Al acercarnos a la zona urbanizada, giro a la derecha y volvemos a subir, un poco más tendido, para meternos de nuevo por el monte. Luego una rápida y preciosa bajada por sendas estrechas y algo reviradas. Corto repecho y enlazamos una buena pista de tierra y piedra que nos va devolviendo a la zona rocosa del primer giro:
Desde allí volvemos hacia Hoyo por la primera pista. Al llegar al pueblo enlazamos con otra que lo bordea por el oeste. Giro a la izquierda y empieza la última y larga subida por las faldas de la montaña. Se sube pero también se corre, así que es estupenda. Además, a estas alturas, los corredores con lo que voy está claro que somos de un nivel semejante, con lo que es más fácil mantener un buen ritmillo por aquello de mantener el tipo.
Al llegar por las alturas de la parte norte de Hoyo, giro a la derecha y entramos en una zona de pasto, en suave cuesta abajo, por caminos de tierra, hierba y barro. Esto fue lo más espectacular de la carrera, un grupito de cuatro totalmente lanzados dirección al pueblo y con muchas ganas de hacerse con el puesto. Yo iba siempre bien colocado y con un puntito de reserva, mi única preocupación era no torcerme un tobillo por lo irregular del suelo. Al acabar la zona de pasto había un muro de piedra que había que... ¡saltar! Por no perder comba apoyé una mano, salté, y con culazo incluido me vi ya lanzado por las calles de asfalto del pueblo. Ahora la cuesta sí era bien pronunciada. Momento de tensar la cuerda, adelantar, esprintar... y entrar en meta. Ja ja ja.... qué bien estuvo, los mismos que habíamos disputado el puesto como posesos estuvimos un rato charlando y riéndonos de lo bien que lo habíamos pasado.
915 corredores entraron en meta, esta carrerita de primavera tiene una buena proyección popular, con una organización muy atenta y profesional. Yo tardé 54m52s (4´35´´/km de media). 46º de la general y 10º (de 142) veterano masculino 45+.
Otra buena experiencia en mi preparación montañera.